No todos somos iguales, de la misma manera que no todas las puertas de interior lo son. Las puertas pueden diferir según el material, el color, la apertura y el diseño. Por eso si estás pensando en renovar tus puertas de interior te recomendamos que leas antes este post para saber qué estilo de puerta encaja contigo.
Puertas clásicas
Para personas clásicas. No queremos decir que lo clásico sea aburrido, sino que lo clásico nunca falla. Cuando hablamos de puertas clásicas nos referimos a las puertas que todos conocemos, las puertas abatibles. Dicho esto podemos optar por puertas clásicas ciegas o puertas con cristaleras.
Recuerda que para estancias amplias puedes colocar una de doble hoja.
Puertas correderas
Para los ahorradores y prácticos. Un puerta corredera te permite ahorrar espacio y son muy discretas. Si bien existen dos tipos de puertas correderas:
- Las puertas correderas empotradas, o aquellas que se integran en la pared. Estas puertas no son visibles cuando están abiertas. Hay que tener en cuenta que conllevan una pequeña obra y por consiguiente un mayor coste
- Las puertas correderas vistas. No requieren de obra ya que van sobre unas guías. Lo mejor de estas puertas es que actualmente existen gran variedad de diseños de guías, por lo que puedes elegir la que mejor se adapte al diseño de tu vivienda.
Puertas plegables
Para los que no se deciden entre puertas clásicas y puertas correderas existen las puertas plegables. Se ven menos que las correderas y no necesitas el mismo espacio que para las clásicas. Este tipo de puerta también existen con cristaleras para aportar amplitud y luminosidad a la estancia o unificar espacios.
Si estás pensando en cambiar las puertas de tu vivienda contacta con nosotros. Somos especialistas en puertas a medida.